Entregaron certificados de categorización laboral a obreros navales

Veinticinco trabajadores de Astilleros SPI recibieron sus diplomas tras haber mejorado su calificación en una universidad local. El programa cuenta con el apoyo del Ministerio de Trabajo.

La capacitación de trabajadores es uno de los tantos desafíos que enfrenta la industria naval. Las huellas que dejó la desarticulación de su matriz en los noventa son todavía visibles, por caso, en la “transmisión del oficio”.

El proceso tiene un vacío generacional difícil de suplir; pero al mismo tiempo han ido surgiendo del propio sector proyectos educativos que estimulan la formación de cara al desempeño práctico en astilleros y talleres.

Una de las iniciativas es la denominada categorización laboral, por la cual los obreros acceden a una capacitación certificada por una institución educativa y el Ministerio de Trabajo de la Nación que les permite subir un peldaño.

En Mar del Plata, Astilleros Servicios Portuarios Integrados (SPI) ya lo ha puesto en marcha. Durante una primera etapa, veinticinco trabajadores de la firma reforzaron sus conocimientos, cursando en la Universidad UTN.

Los jóvenes obtuvieron sus títulos de medio oficial, oficial y oficial especializado, según cada caso particular, contando también con el apoyo del gremio que los representa, el Saon.

El pasado miércoles por la tarde se realizó la entrega de los certificados en la UTN. Al acto asistieron el presidente de SPI, Horacio Tettamanti, y los representantes del sindicato, Cayo Ayala y Juan Speroni, entre otros.

“Para nosotros es un día muy importante. Podrá resultar un hecho humilde, pero vale la pena destacarlo”, calificó Tettamanti.

Luego, profundizó el concepto: “La idea es institucionalizar la capacitación y darle objetividad a las calificaciones para que no sea mal utilizada por ninguno de los actores (…) A veces las calificaciones laborales terminaban siendo una mercadería de cambio, utilizada en forma inescrupulosa”.

Ya en un plano de corte macro, Speroni apuntó su discurso a la necesidad de crecimiento que tiene la industria a partir del caudal marítimo y fluvial con que cuenta nuestro país.

“Un acto de esta naturaleza nos llena de satisfacción, pero tenemos que aportar soluciones a la demanda de un mercado posible, que la industria naval en lugar de tener tres mil trabajadores, pase a tener veinte mil”, dijo.

Ayala coincidió en esa visión al señalar: “Queremos ratificar que tenemos todo por hacer y a las escuelas de capacitación porque nos abren la mente para demostrarnos que somos capaces de hacer barcos”.

 

Fuente: pescare.com.ar